
Ser o no ser madre, ¿es esa la cuestión?
Por qué ser madre, ser madre no es fácil, no quiero ser madre y mi pareja sí, libros sobre ser o no ser madre, no sé si quiero ser madre, cómo saber si quiero ser madre, qué significa ser madre, edad para ser madre, ser madre soltera, etc.
Hay muchas maneras de estar en este mundo y el “ser o no ser madre” es una decisión personal, privada e intransferible. Resulta increíble pensar que este tipo de cosas se consulten en los motores de búsqueda, pero la crítica social y el poder de internet nos han llevado hasta tal punto.
Querida mujer:
¿Personas de tu entorno empiezan a tener hijos y sientes cierta presión social?, ¿tu reloj biológico te hace plantearte la maternidad?, ¿ves tu intimidad constantemente expuesta y cuestionada?, ¿siempre has tenido claro que no quieres ser madre?

Y si eso no fuera suficiente, seguramente también hayas tenido que escuchar comentarios del tipo: ¿y para cuándo la boda y los niños?; se te va a pasar el arroz; te quedan pocos años para plantearte ser madre; a ver si les das un nieto a tus padres, que seguro que les hace ilusión…
Se da por supuesto que “has a ser madre”. Así, sin anestesia, sin preguntarte si eso es lo que verdaderamente quieres. Además, esa suposición se hace sin una pizca de empatía, sin pararse a pensar en que quizás no puedes tener hijos, quizás hayas sufrido un aborto, quizás lo estés intentando y hasta el momento no haya funcionado, quizás tu situación económica no te lo permita, quizás no hayas encontrado aún a la pareja ideal, quizás te da pánico el parto o quizás simplemente no quieres ser madre.
Y a pesar de todos estos “quizás” que nadie tiene en cuenta, tienes que escuchar lo que los demás esperan de ti. Si contestas cosas del tipo “no es mi prioridad ahora mismo”, “no me gustan los niños” o “no me veo siendo madre”, las caras de desconcierto te podrían hacer creer que estás loca, que no es la decisión correcta. Y por no abrir un melón que derivará en una larga discusión que no te apetece, prefieres echar una sonrisa tonta y callar.

Ser madre supone una preparación mental. No es una decisión que se pueda tomar de la noche a la mañana. No es como ir al super y elegir qué tipo de yogures te apetece probar. Ser madre es una decisión extremadamente generosa, altruista y sacrificada. Una decisión que pondrá tu vida del revés: una personita pasará a ser tu prioridad por el resto de tu vida.
Tomar la decisión de tener un hijo es trascendental. Se trata de decidir que tu corazón caminará siempre fuera de tu cuerpo. Elizabeth Stone

Pero, ¿por qué lo que piensan los demás te tiene que hacer sentirte incómoda?. ¿Por qué callar?, ¿por qué no darle la vuelta a la situación?
Señoras y señores opinólog@s de la maternidad: ¿cómo se atreven a meterse en mis decisiones vitales privadas?, ¿quién les ha dicho que por el simple hecho de ser mujer “tengo que ser madre”? Permítanme ilustrarles con un estupendo refrán: Más vale buen callar que mal hablar.


